(Ciudad Juárez, Chihuahua. 27 de abril de 2022) - Durante las celebraciones de los pasados días santos, las y los jóvenes de la Pascua Juvenil Salesiana del Oratorio Nuestra Señora de Guadalupe “Lupita” en Ciudad Juárez, vivieron el día jueves un momento de apostolado en parques aledaños al oratorio en donde hicieron servicio de limpieza, regaron árboles, llevaron comida y agua para animales callejeros, entre otras actividades.

Esta actividad consistió en dividirse en dos equipos para asistir a dos parques de la comunidad, ahí brindaron su servicio el cual tenía como finalidad dar a entender que con una buena actitud se puede hacer una gran diferencia en la comunidad. Uziel Paredes, animador de la pascua juvenil, comentó que muchas veces se desconoce cómo está nuestro entorno y las personas que habitan en él y que, con pequeñas acciones se puede mejorar.

“Nosotros quisimos enseñarle a los chicos que para llegar a la santidad no se necesitan hacer acciones tan grandes con grandes sacrificios, enseñándoles que con buenos actos y ayudando a los demás se puede llegar a la santidad… y así como Jesús nosotros queremos llegar de corazón en corazón para lograr un cambio más grande”, expresó Valentina Portillo, animadora de la pascua juvenil y perteneciente al grupo de Amigos de Domingo Savio -ads-, quien junto a otros setenta jóvenes entre hombres y mujeres fueron los participantes en esta actividad de servicio.

Las y los jóvenes comparaban la actividad que realizaron con el acto de lavado de pies, ya que como Jesús que hizo un acto bondadoso hacia sus discípulos demostrando que todos somos iguales, ellos y ellas quisieron hacer lo mismo al momento de salir a las calles para realizar las actividades mencionadas con anterioridad. “Me llena mucho de gratitud esta actividad porque si nosotros vamos enseñándole a la gente a ayudar, esperemos que un futuro la gente tenga como objetivo no solo vivir para ellos mismos sino también al servicio de las demás personas” puntualizó Valentina.

Este año la pascua juvenil salesiana se vivió en los tres oratorios respectivamente (Don Bosco, Domingo Savio y Lupita), de jueves a sábado adentrándose a la vivencia del viacrucis, temas diversos y sobre todo las celebraciones de los días santos finalizando con la vigilia pascual.