(Tlaquepaque, Jalisco - 10 de noviembre de 2020) - El pasado 15 de octubre de 2020, Ramón Salcido, coordinador académico del ISS, informó que finalmente la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología (SICyT) del estado de Jalisco ha entregado los primeros paquetes de títulos de Licenciado en Teología para los estudiantes egresados de nuestro Instituto Superior Salesiano.

Es un proceso que se había dilatado por lo menos cuatro años, debido en parte a nuestra inexperiencia y a que fue un trámite totalmente nuevo (la elaboración del título y la papelería oficial, de acuerdo a la normativa vigente por parte de la SICyT), y también a los atrasos generados en los trámites dentro de la misma Secretaría. Ahora se ha logrado esta aprobación, con lo cual podremos entregar el título de Licenciado en Teología a las dos primeras generaciones de egresados. Confiamos en que el trámite se volverá más ágil para las siguientes generaciones que vayan concluyendo sus estudios.

Es necesario resaltar el hecho de que la entrega de estos títulos representa la coronación de un esfuerzo que inició hace 10 años, cuando se iniciaron los trámites para la obtención del RVOE de los estudios de Teología. En el entretiempo hemos tenido la oportunidad de obtener nuevas enseñanzas; ha habido momentos de incertidumbre y frustración, pero también de gozo y esperanza conforme se iban dando pasos firmes hacia la culminación de este proceso. Hay que decir que no ha sido sencillo, si tomamos en cuenta que vivimos en un país que se ha caracterizado por su anticlericalismo, lo cual nos hizo pensar en más de un momento que esto que hoy vivimos no sería posible.

Por ahora los estudiantes egresados que recibirán su título son un total de 23, quedando pendientes los estudiantes correspondientes a las generaciones de la tercera a la quinta. Confiamos en que esto tarde menos tiempo del que ahora hemos tenido que esperar.

En el Instituto Superior Salesiano seguimos trabajando con una misión clara: contribuir en la formación de los futuros pastores de la Iglesia, en un mundo globalizado, el cual nos demanda cada día una cualificación seria, una fe más sólida, una esperanza más viva y una caridad más solícita, a favor de los jóvenes, especialmente de lo más pobres y necesitados.