(San Luis Potosí, San Luis Potosí. 19 de octubre de 2021) - El pasado 8 de octubre los alumnos de Bachillerato y del Técnico Superior Universitario del Instituto Salesiano Carlos Gómez realizaron el tradicional Rally al Valle de los Fantasmas.

Después de dos años de que la actividad tuvo que ser suspendida debido a la pandemia de la covid-19, finalmente este ciclo escolar fue posible que las y los jóvenes viajaran, con todas las medidas sanitarias, para vivir esta experiencia al aire libre en una de las zonas naturales más populares dentro de San Luis Potosí.

El rally contó con 13 bases y retos que las y los muchachos, divididos en equipos, tuvieron que pasar. Las pruebas implicaban la colaboración y el trabajo en equipo, el cual es uno de los principales objetivos de la actividad, razón por la que se realiza al inicio del Ciclo Escolar. “Este rally significó algo bien bonito, el ver cómo del primer año a este mi grupo se ha vuelto más unido. En este rally solo pensaba: ‘Es el último y lo tengo que disfrutar’, por lo que no me importaba mojarme muchísimo, ensuciarme y caerme”, expresó Miriam Cid, estudiante de último año de Bachillerato Tecnológico.

Los miembros de staff fueron los encargados de dirigir los retos de cada base, resaltando el protagonismo de los jóvenes dentro de la actividad y el carisma que los caracteriza como asociación. “Vivir el rally siendo parte de staff fue una experiencia muy padre, el ver a todos los grupos pasar dándose ánimos entre ellos para completar la base y siempre apoyándose da mucha alegría, también es muy enriquecedor el hecho de que nosotros fuimos completos encargados del rally y pudimos vivirlo de una forma muy energética y alegre”, comentó Miguel Milán, representante del Movimiento Juvenil Salesiano a nivel local.

Algunas de las bases favoritas fueron “noviecitas”, la cual consistía en pasar de extremo a extremo sobre la espalda a las mujeres del equipo por un campo lleno de fango, y “pecho tierra” por la cual el grupo recorrió un riachuelo boca abajo.

Llenos de lodo, agua y tierra regresaron a casa los más de 500 muchachos que asistieron a la actividad.