(Zapopan, Jalisco. 28 de junio de 2022) - El pasado jueves 23 de junio a las 19:00 horas, el salesiano originario de Guadalajara, Julio César Yáñez Puente dijo, sí a Dios, para vivir perpetuamente su compromiso en la congregación salesiana. La celebración fue presidida, por el P. Filiberto González, SDB, inspector de MEG, en el auditorio del Colegio Salesiano Anáhuac Chapalita en Zapopan, Jalisco.
El P. Filiberto en su homilía les recordó a los presentes que es preciso “sentirse elegido, pertenecerle y corresponderle a Dios”, haciendo referencia a la “experiencia de amor” que vivimos desde que somos bautizados y le pertenecemos a Dios, una experiencia que además pide ser correspondida. Por otro lado, les hizo reflexionar sobre el: “¿Quién nos podrá separar del amor de Dios?, aún en las pequeñas y grandes dificultades, porque todo lo podemos gracias a Él que nos amó”, vinculando la promesa definitiva de Julio, al entender que: “Ningún otro amor nos separará del amor de Dios, porque la fuerza nos viene de Él”. Por último, exhortó a los asistentes a no “desconectarse del amor de Dios”.
Esta consagración definitiva y solemne, fue realizada de acuerdo a la fórmula de la profesión, contenida en el artículo 24 de las constituciones de los salesianos, donde el candidato a la vida religiosa salesiana entendió a dirigirse a Dios con estas palabras: “como respuesta al amor de Jesús, tu Hijo, que me llamó a seguirlo más de cerca, y, conducido por el Espíritu Santo, que es luz y fuerza, yo, con plena libertad, te ofrezco todo mi ser”, prometiendo también, gastar todas sus fuerzas, especialmente por los jóvenes más pobres.
Después, como signo de comunidad fraterna, cada hermano salesiano de la inspectoría, recibió con un abrazo al nuevo profeso perpetuo. Además, de manos del inspector, Julio César recibió la cruz del buen pastor, distintivo que llevan los salesianos en el mundo, “signo de resurrección y de vida, recuerdo del compromiso pastoral por los hermanos, especialmente por los más jóvenes”.